Una canción puede ser tu favorita, pero no necesariamente de quienes la interpretan. Esto es lo que pasa porque la escuchan demasiado o simplemente, sienten que lo nos representa como banda.

Cinco músicos que odian sus propias canciones
Cinco músicos que odian sus propias canciones

Cuando Radiohead tocó “Creep” en Lima, fue un momento único para los fanáticos de la banda. Sin embargo, Thom Yorke y compañía han declarado abiertamente que odian esta canción que, según los críticos, marcó una generación.

Así como sucede con la banda británica, hay otros artistas que también odian sus canciones más exitosas, sea porque no les gusta, la escribieron en un momento que prefieren olvidar o los fanáticos les pidan que la interpreten en todo momento.

Esta es la lista

1.- “Like a Virgin” de Madonna

En el 2008, la reina del pop dijo que no quería volver a cantar “Holiday” ni “Like a virgin”. “Cada vez que voy a un lugar, suenan mis canciones más antiguas. Estoy cansada de esos trabajos”, comentó que no le gusta escuchar sus temas cuando va de compras o a restaurantes.

2.- “Shinny Happy People” de REM

Un himno de los 90 odiado por sus propios intérpretes. La banda de rock alternativo ha admitido que odia este sencillo, pese a ser uno de sus mayores éxitos de su carrera.

3.- “Sympathy for the devil” de Guns N’ Roses

En este caso es Slash quien detesta la versión. En su autobiografía el músico comentó que es el tema de la banda que no volvería a escuchar nunca más. “Si alguna vez se preguntaron cómo suena un grupo antes de romperse, escucha esta versión”, indicó.

4.- “Creep” de Radiohead

El disgusto de Thom Yorke y compañía hacia esta canción siempre ha sido pública. Pese a que le dio popularidad, la banda decidió dejarla fuera de sus setlist en diferentes conciertos.

5.- “Smells Like Teen Spirit” de Nirvana

“Smells Like Teen Spirit” es probablemente una canción que ha sonado tanto, que no solo a Kurt Cobain pudo haberle cansado. El fallecido músico sintió en su momento, que este tema opacó a las demás y nunca supo la razón. “Todo el mundo se fijó demasiado en ella, sentí vergüenza al tocarla”, indicó.