Michael Jackson falleció víctima de una intoxicación aguda de propofol, un anestésico de uso hospitalario que usaba con frecuencia para tratar su insomnio.

El juicio por la muerte de Michael Jackson  va entrando a su parte final luego de que se cerró la fase testimonial y de presentación de pruebas para dar paso a los alegatos finales, después que el acusado médico Conrad Murray, dicidiera no testificar en su defensa.

Los fiscales y abogados del médico Murray dieron por finalizado los planteamientos del caso y el juez de la Corte Superior del Condado de Los Angeles, invocó al jurado para una nueva sesión programanada para el jueves 03 de noviembre en la que las partes tendrán que resumir sus argumentos en función de lo visto durante el juicio.

Tras estos alegatos finales, el proceso juducial quedará ya en manos de todos los integrantes del jurado  que tendrán que dar un veredicto sobre si Conrad Murray cometió  un homicidio involuntario por la muerte del "Rey del pop".

DATO: En caso de que el veredicto no sea favorable para Murray, el médico se enfrentaría a una condena de hasta 4 años de cárcel. Murray admitió a la Policía haber administrado propofol al artista la jornada de su muerte después de que Jackson se lo pidiera tras una noche sin lograr conciliar el sueño y haber tratado sin éxito de conseguir el mismo efecto con otros sedantes.