El actor intentó ahorcar al director, trató de forma despectiva a Ryan Reynolds, entre otros problemas

Wesley Snipes
Wesley Snipes

La tercera película de Blade, Trinity, fue tal vez una de las que más problemas ha tenido. En su mayoría, debido al carácter de su protagonista: Wesley Snipes.

Según contó en el 2012 Patton Oswalt al portal The A.V. Club, Snipes se quedaba en su camerino fumando hierba y generó problemas sin sentido. “Recuerdo que un día en el set, había otro actor de raza negra que tenía una camiseta con la palabra ‘Garbage’ (basura). Él pensó que el director´, David Goyer, lo había obligado a usarla y le gritó: ‘Maldito racista’ y trató de ahorcarlo”, contó la actriz.

Tras este incidente, Goyer les pagó a unos ciclistas para que se hicieran pasar por su seguridad el siguiente día de filmación. “Wesley se asustó y se regresó a su camerino sin hacer problemas”, agregó Oswalt.

Pero los problemas no quedaron ahí. Snipes también tuvo problemas con Ryan Reynolds. Un ejecutivo de la película contó que el actor sentía tantos celos de su compañero que se refería a él de forma despectiva. La tensión entre ambos llegó a tal punto que Reynolds hizo sus escenas solo porque Wesley no quiso grabar con él.

Tras estrenada la película, Snipes no tuvo mejor idea que demandar a la producción y a New Line Cinema por 5 millones de dólares, indicando que “fue forzado a hacer la película, no se le pagó lo que le correspondía y fue maltratado por su color de piel”. La demanda se resolvió fuera de los tribunales y se le entregó una suma que no ha sido revelada.