El 2016 fue un año de grandes pérdidas. Empezamos el año con la muerte del Duque Blanco, David Bowie. Lamentablemente era solo el inicio de un año con grandes partidas.

Aún así, tenemos que recordar que todos ellos dejaron un legado imborrable en la música. Ya sea con su talento para organizar y llevar a nuestros oídos lo mejor de la música, por su magia al componer e interpretar temas o por haber descubierto a grandes estrellas. Todos han aportado a que la música sea lo que hoy es.

Algunos de ellos tenían eso muy claro y hasta se despidieron con trabajos en los que pusieron todo su empeño. A ellos, nuestra gratitud y eterno recuerdo.